Por:Gabrel Castillo
El Presidente del PRD en DF, José Manuel Oropeza Morales, aseguró que las divergencias que se tienen al interior del partido y con el gobierno del Distrito Federal en torno al asunto de la supervía Poniente no son para alarmarse, porque forman parte de la vida democrática del instituto político.
Dejó en claro que el PRD en la Ciudad de México jamás establecerá ningún acuerdo con el PAN, porque su “supuesta oposición a la supervía y la defensa hipócrita de los ciudadanos afectados, sólo demuestra que ese partido utiliza cualquier asunto para confrontar al gobierno de la ciudad”.
En conferencia de prensa en la que dio lectura a un proyecto de resolución que presentó al secretariado estatal del PRD DF, el dirigente perredista dejó en claro que lo importante del debate sobre la nueva vialidad, radica en encontrar una postura común para fortalecer al Distrito Federal con una perspectiva de izquierda y congruente con la lucha del PRD en la capital del país.
“Lo que no vamos a permitir es que la derecha aproveche este debate en la izquierda para enfrentar al gobierno, capitalizar el conflicto y atacarnos. La unidad del perredismo capitalino no está en duda. Que el PRI y el PAN no se hagan ilusiones no gobernarán esta ciudad”, estableció.
Insistió en que la oposición del PAN contra la supervía Poniente y la defensa hipócrita de los ciudadanos afectados, sólo demuestra que este partido utiliza cualquier asunto para confrontar al gobierno de la Ciudad de México.
Se olvida, agregó, de opinar sobre la grave situación que vive el país, de los miles de trabajadores que han perdido sus empleos por la incapacidad del espurio Calderón, de las agresiones al SME y la insensibilidad del gobierno federal para resolver la huelga de hambre masiva que está instalada en el zócalo, de los miles de asesinatos resultado de su fracasada guerra contra el narcotráfico.
“Que quede claro, en nuestra ciudad, combatimos a la derecha panista responsable de destruir al país”, reforzó.
Oropeza Morales estableció que el PRD DF defenderá sin titubeos al Gobierno de la Ciudad y a los gobiernos de las delegaciones de cualquier intento de agresión del PRI o del PAN, es convicción y responsabilidad política.
“Por eso no vamos a permitir ninguna acción que represente violentar la voluntad popular de la cual emanan los gobiernos perredistas. Si los panistas tienen interés en cambiar gobiernos que empiecen por pedirle la renuncia a Felipe Calderón”, enfatizó.
Reiteró que el tema de la supervía genera opiniones diversas al interior del partido, lo cual es parte la riqueza política del PRD. “Sin embargo, el debate tiene que encontrar un nuevo camino, de respeto de las ideas y de los ámbitos de competencia, somos el partido en el gobierno, y por lo tanto, debemos fortalecer la relación del partido con el Gobierno de la Ciudad, compartir una agenda e información, aceptar puntos de vista divergentes y marchar unidos en la defensa de la ciudad”, dijo.
“En esta lógica, abriremos un análisis respetuoso y de fondo, institucional con los especialistas y actores del PRD sobre el rumbo del Distrito Federal, las políticas públicas en las que tenemos diferencias de opinión, y sobre la estrategia que debe seguir el PRD rumbo al 2012, con la misión clara de volver a ganar la capital de la república para la izquierda y lograr el buen vivir para sus habitantes”, destacó.
“El PRD en el DF, ciudad que gobernamos, reafirma su compromiso con la democracia, la justicia social, y las transformaciones que permitan el desarrollo de la capital, en el centro de nuestro actuar debe estar siempre el beneficio general de la población”, agregó.
En este sentido es fundamental resolver la transportación y movilidad de los ciudadanos, evitar el derroche de tiempo de los que aquí vivimos o trabajamos y garantizar la sustentabilidad de la Ciudad de México. Impulsar sistemas de transportación masiva, inhibir al máximo el uso del automóvil, promover el transporte no contaminante, preservar el medio ambiente y la posibilidad de construir nuevas vialidades deben ser partes de una visión y una estrategia general para enfrentar el desarrollo urbano de la ciudad, finalizó.
El Presidente del PRD en DF, José Manuel Oropeza Morales, aseguró que las divergencias que se tienen al interior del partido y con el gobierno del Distrito Federal en torno al asunto de la supervía Poniente no son para alarmarse, porque forman parte de la vida democrática del instituto político.
Dejó en claro que el PRD en la Ciudad de México jamás establecerá ningún acuerdo con el PAN, porque su “supuesta oposición a la supervía y la defensa hipócrita de los ciudadanos afectados, sólo demuestra que ese partido utiliza cualquier asunto para confrontar al gobierno de la ciudad”.
En conferencia de prensa en la que dio lectura a un proyecto de resolución que presentó al secretariado estatal del PRD DF, el dirigente perredista dejó en claro que lo importante del debate sobre la nueva vialidad, radica en encontrar una postura común para fortalecer al Distrito Federal con una perspectiva de izquierda y congruente con la lucha del PRD en la capital del país.
“Lo que no vamos a permitir es que la derecha aproveche este debate en la izquierda para enfrentar al gobierno, capitalizar el conflicto y atacarnos. La unidad del perredismo capitalino no está en duda. Que el PRI y el PAN no se hagan ilusiones no gobernarán esta ciudad”, estableció.
Insistió en que la oposición del PAN contra la supervía Poniente y la defensa hipócrita de los ciudadanos afectados, sólo demuestra que este partido utiliza cualquier asunto para confrontar al gobierno de la Ciudad de México.
Se olvida, agregó, de opinar sobre la grave situación que vive el país, de los miles de trabajadores que han perdido sus empleos por la incapacidad del espurio Calderón, de las agresiones al SME y la insensibilidad del gobierno federal para resolver la huelga de hambre masiva que está instalada en el zócalo, de los miles de asesinatos resultado de su fracasada guerra contra el narcotráfico.
“Que quede claro, en nuestra ciudad, combatimos a la derecha panista responsable de destruir al país”, reforzó.
Oropeza Morales estableció que el PRD DF defenderá sin titubeos al Gobierno de la Ciudad y a los gobiernos de las delegaciones de cualquier intento de agresión del PRI o del PAN, es convicción y responsabilidad política.
“Por eso no vamos a permitir ninguna acción que represente violentar la voluntad popular de la cual emanan los gobiernos perredistas. Si los panistas tienen interés en cambiar gobiernos que empiecen por pedirle la renuncia a Felipe Calderón”, enfatizó.
Reiteró que el tema de la supervía genera opiniones diversas al interior del partido, lo cual es parte la riqueza política del PRD. “Sin embargo, el debate tiene que encontrar un nuevo camino, de respeto de las ideas y de los ámbitos de competencia, somos el partido en el gobierno, y por lo tanto, debemos fortalecer la relación del partido con el Gobierno de la Ciudad, compartir una agenda e información, aceptar puntos de vista divergentes y marchar unidos en la defensa de la ciudad”, dijo.
“En esta lógica, abriremos un análisis respetuoso y de fondo, institucional con los especialistas y actores del PRD sobre el rumbo del Distrito Federal, las políticas públicas en las que tenemos diferencias de opinión, y sobre la estrategia que debe seguir el PRD rumbo al 2012, con la misión clara de volver a ganar la capital de la república para la izquierda y lograr el buen vivir para sus habitantes”, destacó.
“El PRD en el DF, ciudad que gobernamos, reafirma su compromiso con la democracia, la justicia social, y las transformaciones que permitan el desarrollo de la capital, en el centro de nuestro actuar debe estar siempre el beneficio general de la población”, agregó.
En este sentido es fundamental resolver la transportación y movilidad de los ciudadanos, evitar el derroche de tiempo de los que aquí vivimos o trabajamos y garantizar la sustentabilidad de la Ciudad de México. Impulsar sistemas de transportación masiva, inhibir al máximo el uso del automóvil, promover el transporte no contaminante, preservar el medio ambiente y la posibilidad de construir nuevas vialidades deben ser partes de una visión y una estrategia general para enfrentar el desarrollo urbano de la ciudad, finalizó.
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